lunes, 19 de abril de 2010

Limpia, fija y da esplendor.

6/2/2000

Acabo de recibir un e-mail de Pepe Perona, el maestro de Gramática, reproduciendo otro que le ha enviado no sabe quién. Desconocemos el nombre del autor original, así que, en esta versión postmoderna del manuscrito encontrado, me limito a seguir el juego iniciado por mano genial y anónima. El maravilloso texto se refiere a una supuesta reforma ortográfica que va a aplicar la Real Academia, a fin de hacer más asequible el español como lengua universal de los hispanohablantes y de las soberanías soberanistas. Y lo reproduzco con escasas modificaciones. Según el plan de los señores académicos -expertos en lanzada a moro muerto-, la reforma se llevará a cabo empezando por la supresión de las diferencias entre c, q y k. Komo komienzo, todo sonido parecido al de la k será asumido por esta letra. En adelante se eskribirá kasa, keso, Kijote. También se simplifikará el sonido de la c y la z para igualarnos a nuestros hermanos hispanoamerikanos: "El sapato ke kalsa Sesilia es asul", y desapareserá la doble c, reemplasándola la x: "Mi koche tuvo un axidente". Grasias a esta modifikasión los españoles no tendrán ventajas ortográfikas frente a los hermanos hispanoparlantes por su extraña pronunsiasión de siertas letras. Se funde la b kon la v, ya ke no existe diferensia entre el sonido de la b larga y la v chikita. Por lo kual desapareserá la v y beremos kómo obbiamente basta kon la b para ke bibamos felises y kontentos.

martes, 13 de abril de 2010

Criterios específicos de corrección del examen de Selectividad.


CRITERIOS ESPECÍFICOS DE CORRECCIÓN DE CADA UNA DE LAS PARTES
DEL EXAMEN
Nota general: Exceptuando aquello que en el examen ha sido modificado con respecto
al modelo anterior, y algunas recomendaciones que se hacen para determinadas partes, estos
criterios no difieren básicamente de los hasta ahora vigentes.
Parte 1
a) El resumen del texto ha de ser de menor extensión que el propio texto y habrá de recoger todas las ideas expuestas en él, separando la idea o ideas principales y las ideas secundarias que sirven para apoyarlas. Este resumen, por tanto, habrá de presentar, en una redacción coherente y correcta, una síntesis breve, de las ideas del texto. Adviértase que un error muy extendido es el de copiar literalmente las frases más significativas del texto, hilvanándolas entre sí.
b) La parte correspondiente a la argumentación y opinión personal (“comentario personal de un determinado aspecto reflejado en el texto”), ha de plasmarse en una redacción coherente, correcta y bien argumentada, orientada hacia el aspecto concreto propuesto en el guión del comentario del texto. Con esto se trata de ver la madurez del alumno o de la alumna, es decir, su capacidad de sintetizar y de enjuiciar con ponderación, de forma razonada y personal, las opiniones expuestas en el texto. En ningún caso se impondrá el criterio subjetivo del examinador (en cuanto a las opiniones políticas o de otra índole expuestas de forma personal por el examinando), sino que se atenderá exclusivamente a la adecuación de la exposición que se haga a lo que se pide y a una redacción correcta, como en cualesquiera otras partes del
comentario.
Comoquiera que por esta parte del examen se pueden obtener hasta 2 puntos, el Seminario entiende que se ha de recomendar a los docentes que pongan especial atención en la preparación de los alumnos para la resolución de este ejercicio, que es el que de forma más clara muestra la capacidad argumentativa, expositiva y expresiva del alumnado.
Por tanto, se insiste aquí en que se valorará especialmente la presentación de un texto bien estructurado en cuanto a la argumentación de las ideas que se expongan (planteamiento, argumentos, conclusiones) y que las ideas o argumentos expuestos sean personales y originales.
Evidentemente no se valorará positivamente el que se haga una mera repetición o paráfrasis de
las ideas o argumentos ya expresados en el texto o en los contenidos teóricos del tema con el que el texto esté relacionado.

Criterios generales de evaluación de Selectividad

CRITERIOS GENERALES DE EVALUACIÓN DE LOS EXÁMENES DE
ACCESO A LOS ESTUDIOS DE GRADO
(PAU, SELECTIVIDAD)
MATERIA: LENGUA CASTELLANA Y LITERATURA
Estructura de la prueba:
El examen de la Prueba de Acceso a los Estudios de Grado de la materia de Lengua Castellana y Literatura consistirá en el comentario, por escrito, de un texto no especializado de carácterinformativo o divulgativo, relacionado con los objetivos y contenidos de Lengua Castellana y Literatura II. El comentario será guiado, en el sentido de que podrá incorporar una serie de cuestiones directamente relacionadas con el contenido y la forma del texto que ha de ser comentado. Parte de estas cuestiones serán de naturaleza práctica y se encaminarán a determinar la asimilación por parte del alumno o la alumna de los contenidos de la materia y de sus capacidades a este respecto.
El examen presentará dos opciones de las cuales se habrá de elegir una.
Esquema general del examen:
Parte 1: Comentario del texto (estructura interna y contenido)
a) Resumen del contenido del texto.
b) Comentario personal sobre las ideas o alguna de las ideas expresadas en el texto.
c) Relación del contenido del texto, o de un determinado aspecto de éste, con el contexto teórico (literario, lingüístico) con el que esté relacionado.
Parte 2: Comentario lingüístico del texto (estructura externa)
a) Explicación general y breve del tipo de texto propuesto, de los elementos y funciones de la comunicación presentes y de las características fundamentales del lenguaje empleado, todo ello estrictamente relacionado con el texto y bien ejemplificado.
b) Explicación del significado de una serie de formas extraídas del texto y construcción de unos enunciados con estas mismas palabras.
c) Comentario sintáctico-gramatical de un enunciado extraído del texto.
Puntuación de cada parte:
Cada parte del comentario que constituye el examen de Lengua Castellana y literatura se valorará con arreglo a las siguientes puntuaciones máximas:
Parte 1:
1. Resumen del texto: 1 punto
2. Comentario personal de un aspecto del texto: 2 puntos
3. Explicación del contexto teórico: 2,5 puntos
Parte 2:
1. Tipo de texto y características: 1 punto
2. Definición de palabras y ejemplos de uso: 1,5 puntos
3. Comentario sintáctico: 2 puntos
Criterios Generales de Evaluación:
Se tendrán en cuenta, en todo el comentario, los aspectos elementales del buen uso del idioma, pues, mediante el examen realizado, se trata de comprobar, entre otros aspectos, las capacidades que el alumno o la alumna tienen en el uso de la lengua castellana o española, las cuales se plasman de forma más concreta en los siguientes aspectos:
1. Se ha de utilizar en todo el comentario una redacción coherente, es decir, sin anacolutos, sin faltas de concordancia, sin omisión de las preposiciones necesarias, sin queísmos ni dequeísmos y sin otra clase de errores gramaticales, e igualmente sin recurrir obsesivamente a un mismo tipo de construcción sintáctica. Si los errores de este tipo son sistemáticos o muy abundantes, se podrá considerar el examen como no aprobado.

jueves, 8 de abril de 2010

Uno de mis cuentos favoritos

EL HUÉSPED

Nunca olvidaré el día en que vino a vivir con nosotros. Mi marido lo trajo al regreso de un viaje.Llevábamos entonces cerca de tres años de matrimonio, teníamos dos niños y yo no era feliz. Representaba para mi marido algo así como un mueble, que se acostumbra uno a ver en determinado sitio, pero que no causa la menor impresión. Vivíamos en un pueblo pequeño, incomunicado y distante de la ciudad. Un pueblo casi muerto o a punto de desaparecer.No pude reprimir un grito de horror, cuando lo vi por primera vez. Era lúgubre, siniestro. Con grandes ojos amarillentos, casi redondos y sin parpadeo, que parecían penetrar a través de las cosas y de las personas.Mi vida desdichada se convirtió en un infierno. La misma noche de su llegada supliqué a mi marido que no me condenara a la tortura de su compañía. No podía resistirlo; me inspiraba desconfianza y horror. “Es completamente inofensivo” —dijo mi marido mirándome con marcada indiferencia. “Te acostumbrarás a su compañía y, si no lo consigues…“ No hubo manera de convencerlo de que se lo llevara. Se quedó en nuestra casa.No fui la única en sufrir con su presencia. Todos los de la casa —mis niños, la mujer que me ayudaba en los quehaceres, su hijito— sentíamos pavor de él. Sólo mi marido gozaba teniéndolo allí.Desde el primer día mi marido le asignó el cuarto de la esquina. Era ésta una pieza grande, pero húmeda y oscura. Por esos inconvenientes yo nunca la ocupaba. Sin embargo él pareció sentirse contento con la habitación. Como era bastante oscura, se acomodaba a sus necesidades. Dormía hasta el oscurecer y nunca supe a qué hora se acostaba.Perdí la poca paz de que gozaba en la casona. Durante el día, todo marchaba con aparente normalidad. Yo me levantaba siempre muy temprano, vestía a los niños que ya estaban despiertos, les daba el desayuno y los entretenía mientras Guadalupe arreglaba la casa y salía a comprar el mandado.La casa era muy grande, con un jardín en el centro y los cuartos distribuidos a su alrededor. Entre las piezas y el jardín había corredores que protegían las habitaciones del rigor de las lluvias y del viento que eran frecuentes. Tener arreglada una casa tan grande y cuidado el jardín, mi diaria ocupación de la mañana, era tarea dura. Pero yo amaba mi jardín. Los corredores estaban cubiertos por enredaderas que floreaban casi todo el año. Recuerdo cuánto me gustaba, por las tardes, sentarme en uno de aquellos corredores a coser la ropa de los niños, entre el perfume de las madreselvas y de las bugambilias.En el jardín cultivaba crisantemos, pensamientos, violetas de los Alpes, begonias y heliotropos. Mientras yo regaba las plantas, los niños se entretenían buscando gusanos entre las hojas. A veces pasaban horas, callados y muy atentos, tratando de coger las gotas de agua que se escapaban de la vieja manguera. Yo no podía dejar de mirar, de vez en cuando, hacia el cuarto de la esquina. Aunque pasaba todo el día durmiendo no podía confiarme. Hubo muchas veces que cuando estaba preparando la comida veía de pronto su sombra proyectándose sobre la estufa de leña. Lo sentía detrás de mí… yo arrojaba al suelo tenía en las manos y salía de la cocina corriendo y gritando como una loca. Él volvía nuevamente a su cuarto, como si nada hubiera pasadoCreo que ignoraba por completo a Guadalupe, nunca se acercaba a ella ni la perseguía. No así a los niños y a mí. A ellos los odiaba y a mí me acechaba siempre.Cuando salía de su cuarto comenzaba la más terrible pesadilla que alguien pueda vivir. Se situaba siempre en un pequeño cenador, enfrente de la puerta de mi cuarto. Yo no salía más. Algunas veces, pensando que aún dormía, yo iba hacia la cocina por la merienda de los niños, de pronto lo descubría en algún oscuro rincón del corredor, bajo las enredaderas. “¡Allí está ya, Guadalupe!”; gritaba desesperada.Guadalupe y yo nunca lo nombrábamos, nos parecía que al hacerlo cobraba realidad aquel ser tenebroso. Siempre decíamos: —Allí está, ya salió, está durmiendo, él, él, él..Solamente hacía dos comidas, una cuando se levantaba al anochecer y otra, tal vez, en la madrugada antes de acostarse. Guadalupe era la encargada de llevarle la bandeja, puedo asegurar que la arrojaba dentro del cuarto pues la pobre mujer sufría el mismo terror que yo. Toda su alimentación se reducía a carne, no probaba nada más.Cuando los niños se dormían, Guadalupe me llevaba la cena al cuarto. Yo no podía dejarlos solos, sabiendo que se había levantado o estaba por hacerlo. Una vez terminadas sus tareas, Guadalupe se iba con su pequeño a dormir y yo me quedaba sola, contemplando el sueño de mis hijos. Como la puerta de mi cuarto quedaba siempre abierta, no me atrevía a acostarme, temiendo que en cualquier momento pudiera entrar y atacarnos. Y no era posible cerrarla; mi marido llegaba siempre tarde y al no encontrarla abierta habría pensado… Y llegaba bien tarde. Que tenía mucho trabajo, dijo alguna vez. Pienso que otras cosas también lo entretenían…Una noche estuve despierta hasta cerca de las dos de la mañana, oyéndolo afuera… Cuando desperté, lo vi junto a mi cama, mirándome con su mirada fija, penetrante… Salté dé la cama y le arrojé la lámpara de gasolina que dejaba encendida toda la noche. No había luz eléctrica en aquel pueblo y no hubiera soportado quedarme a oscuras, sabiendo que en cualquier momento… Él se libró del golpe y salió de la pieza. La lámpara se estrelló en el piso de ladrillo y la gasolina se inflamó rápidamente. De no haber sido por Guadalupe que acudió a mis gritos, habría ardido toda la casa.Mi marido no tenía tiempo para escucharme ni le importaba lo que sucediera en la casa. Sólo hablábamos lo indispensable. Entre nosotros, desde hacía tiempo el afecto y las palabras se habían agotado.Vuelvo a sentirme enferma cuando recuerdo… Guadalupe había salido a la compra y dejó al pequeño Martín dormido en un cajón donde lo acostaba durante el día. Fui a verlo varias veces, dormía tranquilo. Era cerca del mediodía. Estaba peinando a mis niños cuando oí el llanto del pequeño mezclado con extraños gritos. Cuando llegué al cuarto lo encontré golpeando cruelmente al niño. Aún no sabría explicar cómo le quité al pequeño y cómo me lancé contra él con una tranca que encontré a la mano, y lo ataqué con toda la furia contenida por tanto tiempo. No sé si llegué a causarle mucho daño, pues caí sin sentido. Cuando Guadalupe volvió del mandado, me encontró desmayada y a su pequeño lleno de golpes y de araños que sangraban. El dolor y el coraje que sintió fueron terribles. Afortunadamente el niño no murió y se recuperó pronto.Temí que Guadalupe se fuera y me dejara sola. Si no lo hizo, fue porque era una mujer noble y valiente que sentía gran afecto por los niños y por mí. Pero ese día nació en ella un odio que clamaba venganza.

Tipología textual

TEXTO EXPOSITIVO

Texto mediante el cual un emisor pretende presentar un determinado tema a un receptor de forma clara y ordenada para darlo a conocer y hacer que lo comprenda. (Predomina la función referencial)

Requiere un conocimiento suficiente de la cuestión tratada y exige un desarrollo progresivo y articulado de las ideas. La característica fundamental es la ordenación clara y coherente de los contenidos, puesto que lo que se pretende es que el destinatario entienda el tema.

Aspectos ESTRUCTURALES: Las formas de estructuración /ordenación del contenido pueden ser diversas, pero todas ellas deben tener una característica fundamental: ORDENACIÓN CLARA Y COHERENTE DEL CONTENIDO.
Es frecuente que su estructura se ajuste al esquema básico de: Introducción o presentación, desarrollo, conclusión.


Aspectos lingüísticos:

― Vocabulario con significado denotativo; escasez de verbos de acción; escasez de epítetos; abundancia de tecnicismos, adjetivos especificativos y sustantivos abstractos.

― Conectores: Los que marcan el orden del discurso y organizan la información: en primer lugar, en segundo lugar, para resumir; para empezar, en otro orden de cosas, a propósito, en fin... y conectores de tipo lógico (consecutivo, causal, explicativo, ilativo, final): por tanto, por ello, sin embargo, en efecto, así pues...

― Sintaxis oracional: Predominio de oraciones de modalidad enunciativa en 3ª persona; utilización de oraciones impersonales y pasivas reflejas; plural de modestia (Ya hemos señalado) y plural asociativo (como sabemos); frecuente uso de oraciones atributivas y estructuras nominales. Aparecen habitualmente la coordinación y yuxtaposición, la subordinación adjetiva, la adverbial que expresa relación lógica de ideas (causal, final , consecutiva) e hipótesis (condicional). Estructuras de carácter explicativo (subordinadas adjetivas, aposiciones, incisos...).

― Nivel morfológico: Dentro de la morfología verbal, es general el empleo del presente de indicativo a menudo con valor atemporal y del pretérito imp. de indicativo, cuando se expone algo sometido a un proceso temporal.

TEXTO ARGUMENTATIVO

La argumentación es un texto en el que se pretende defender una opinión y persuadir de ella a un receptor mediante pruebas y razonamientos.

Aspectos ESTRUCTURALES: Como en todo tipo de texto, la organización de las ideas es fundamental para alcanzar el objetivo propuesto: convencer al receptor. En todo texto argumentativo hay dos elementos fundamentales: la TESIS y el CUERPO ARGUMENTATIVO. Aunque cada texto tiene su propia organización y estructura, la retórica clásica distinguía cuatro partes en todo texto argumentativo bien construido:

Esquema básico:

- INTRODUCCIÓN: Debe servir para enmarcar el problema que se va a tratar y para captar la atención del destinatario (formulando la tesis, enumerando los temas que se van a tratar, señalando la importancia del tema, presentando hechos sorprendentes y curiosos, narrando un hecho particular...).

- CUERPO ARGUMENTATIVO: Se informa de los hechos significativos relacionados con la idea o tesis que se pretende defender.
Se presentan las pruebas o argumentos pertinentes para la comprobación de la tesis; se refutan las objeciones...

- CONCLUSIÓN: Síntesis de las ideas expuestas y demostradas.

* Aspectos lingüísticos:
Dado que el propósito primero de toda argumentación es la persuasión, los recursos lingüísticos tienen que ver con los objetivos de: COHERENCIA, CLARIDAD y capacidad de INFLUENCIA AFECTIVA.
― La distribución del contenido en párrafos ayuda a asimilar mejor el contenido y favorece la organización de las ideas. También es importante el empleo de los adecuados mecanismos de cohesión, especialmente los CONECTORES para sumar ideas ('además', 'asimismo', 'también' ); para introducir ideas que se oponen ( 'sin embargo', 'en otro orden de cosas', 'no obstante'... ); para introducir otro tema ('en relación con', 'respecto a', 'sobre'...); para introducir la propia opinión: 'a mi modo de ver', 'desde mi punto de vista', en mi opinión...)
— El vocabulario es denotativo en las argumentaciones de tipo científico (con presencia de tecnicismos); pero en textos persuasivos de tipo más subjetivo, se suele hacer uso de los llamados RECURSOS ESTILÍSTICOS (hipérboles, metáforas, antítesis...), de adjetivos y adverbios de tipo valorativo y de un vocabulario más connotativo que produzca un determinado efecto en el destinatario.
— La sintaxis: predomina la modalidad oracional enunciativa. Pero en textos donde se acentúa la actitud personal del autor son frecuentes las modalidades exclamativas, interrogativas y dubitativas.
Uso de la 1ª o 3ª persona en función del mayor o menor grado de subjetividad.
La sintaxis suele ser compleja, con aparición de largos períodos oracionales. Predomina la subordinación acorde con la expresión del razonamiento: comparativas, condicionales, concesivas, consecutivas. Abundan los incisos explicativos.

Temas teóricos de selectividad

CATÁLGO DE “CONTEXTOS TEÓRICOS”, CONTENIDOS O TEMAS

1. La narrativa española de las primeras décadas del s. XX
2. La poesía española en el primer tercio del s. XX
3. Las vanguardias y la poesía del Grupo de 1927
4. El teatro español en el primer tercio del s. XX
5. La narrativa española desde la Posguerra hasta finales de los años 60
6. La narrativa española desde la década de los 70 hasta la actualidad
7. La lírica española desde la Posguerra hasta finales de los años 50
8. La lírica española desde los años 60 hasta la actualidad
9. El teatro español desde la Posguerra hasta la actualidad
10. Los ensayistas en la literatura española del s. XX
11. La literatura hispanoamericana: poesía del s. XX.
12. La literatura hispanoamericana: narrativa de la segunda mitad del s.  XX.
13. Aportación de los escritores extremeños a la literatura española del  s. XX
14. La literatura de las otras lenguas peninsulares
15. La situación lingüística de España: lenguas y dialectos
16. El español de América y la necesidad de una norma panhispánica
17. El léxico castellano: procedimientos de formación léxica y relaciones semánticas entre las palabras